El laboratorio, además, permite pruebas operacionales: una demanda indispensable en las instalaciones de altas exigencias. La amplia gama de productos requiere múltiples conocimientos y soluciones flexibles de fabricación. Las líneas de producción están organizadas por familias individuales de productos y ubicadas, en algunos casos, en diferentes edificios, lo que asegura un entorno técnico y humano altamente especializado.